El 10 de mayo es el día en que muchos eligen regalarle flores a mamá. Ya sea que se regalen rosas, lilis, crisantemos, lisianthus, tulipanes, gerberas, fresias, alstroemerias, claveles, hortensias u otras, debes saber que la gran mayoría de las flores y plantas ornamentales que puedes comprar en viveros y florerías son producto de un proceso de mejoramiento vegetal.
Debido a la creciente demanda, el sector ornamental continuamente requiere nuevas y más variedades con características específicas y especiales, que sólo ha sido posible conseguir gracias al gran trabajo que durante años han llevado a cabo los fitomejoradores.
Imagina que fuera posible diseñar las flores que queremos regalar.
El incremento en el número de flores por planta, la modulación del momento de la floración, una mayor duración de las flores; novedades en la estructura de la flor y rangos de nuevos colores y fragancias, son algunos de los objetivos de quienes se dedican al mejoramiento vegetal de flores y ornamentales[1].
Los crisantemos azules, los ciclámenes amarillos, los lirios rojos y las rosas azules son producto del mejoramiento vegetal.
Por lo mismo, resulta muy conveniente utilizar más herramientas (como la Innovación del Mejoramiento Vegetal o IMV) que permitan desarrollar de manera más rápida eficiente nuevas variedades de flores y plantas ornamentales, pues la presencia de las características mencionadas arriba influye directamente en su valor comercial. Así, se benefician tanto los productores como los consumidores.
Aproximadamente 600 especies de plantas mexicanas tienen un uso ornamental, sin mencionar el valor cultural que tienen este tipo de flores para nosotros, como el Cempaxúchitl o la Nochebuena [2]
[1] Giovannini, A., Laura, M., Nesi, B. et al. Genes and genome editing tools for breeding desirable phenotypes in ornamentals. Plant Cell Rep 40, 461–478 (2021).
[2] https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/640260/2-MC_Mejia__Mejoramiento_de_Ornamentales_en_Mexico.pdf
